miércoles, 17 de abril de 2013




LA MUCHACHA DEL VESTIDO DE BOTONES

Para alejandro Poumian
y por los botones Para 
Eduardo Hidalgo.

El bajo la escalera de sus sueños
para abordar el tren de sus deseos
los recuedos dia jugaban en su cabeza.
De pronto
mientras sus pensamientos se peleaban,
sus ojos se detuvieron
para mirar a la muchacha del vestido de botones
toda una hilera atravesaba su cuerpo.
Ella,
sentada dentro del vagón del metro
y él afuera
llamo fuertemente su atención;
Al levantar el rostro sus ojos le sonrieron.

En un segundo
para él su vida y sus ilusiones se pegaron a cada ojal, 
un torbellino de imágenes
pasaron en carrete al lado de ella.

Sin saber su nombre,
sin conocer el mundo en que vivía,
su futuro se trasladó en un instante
a una cama, a unos hijos, a una casa,
todo, todo junto a ella.

El tren inició su movimiento
a través de la ventana
miró como se alejaba la mujer de sus sueños
su figura quedo impregnada a su memoria,
sobre todo esa hilera de botones;
sus ojos y su imaginación se fueron en ese viaje con ella,
nunca volvió a verla.

Hoy,
treinta años después
como si fuera esa vez
recuerda a la muchacha del vestido de botones
que miro al bajar por la escalera de sus sueños
y que no la olvido jamàs.

CHARY GUMETA
DEL POEMARIO: OJOS DE OBSIDIANA